Sin tocarte...
Autor: ©Rafael Ángel
Inspirado en el poema "Sin tocarme"
de la escritora argentina Sonia Lores.
°
Anoche me acerqué hasta tu
ventana,
y al
ver que dormitabas tiernamente,
me
acerqué con temor hasta tu lecho
y vi
que, en el contorno de tu pecho,
un
Crucifijo, tu mano, apretaba.
Noté que mientras más yo me
acercaba,
tu
noble respirar se sentía inquieto.
Mas
pude ver que un corazón, repleto,
suspiraba... ¡suspiraba!
Y en ese divagar, me preguntaba,
qué ha
de soñar esa durmiente diosa.
¿Estará, acaso, contemplando una rosa?
¿O
sueña con su amor,
y es
extasiada...?
Y así yo penetré hasta tu morada.
Y
recosté mi cabeza en tu cabello.
Fue un
lindo sueño; un placer; todo bello...
y en
aquel sueño, tu boca yo besaba...!
Y te escuché gemir en tu
almohada.
Pude
sentir que el sueño que acogías
te
extendía su placer; te hacia su dueño,
y con
temblores fríos, te retorcías.
Y más que un sueño, era una
fantasía;
y mi
deseo infinito, en vano empeño
me
hizo llegar a aquél, que era tu sueño,
y así,
besar tus labios, lograría.
Pasa la noche; casi llegaba el
día.
Tomé
por riendas tu brilloso cabello,
y como
en un correr, besé tu cuello
para
saber, de pronto, que dormías.
Y consumabas, ha, con osadía,
y sin
saber siquiera, sin quererlo,
un
éxtasis de amor sobrevenía;
un
bordado de tul, salía a tu encuentro.
Mas allí me encontraba, en tu
aposento;
No
pude definir si eran mis sueños,
o si
eran fantasías que, en mil empeños,
bordaba en un soñar; furtivo intento.
Mas un rayo de sol que trajo el
viento
pudo más que el ensueño. Y como
el arte
con que pinta un pintor, un bello
cuento,
me regresé a mi lecho...
¡sin
tocarte...!